«De manera arbitraria cortaron nuestras plantas de aguacate, naranja, limón y plátano que ya estaban en producción y que con tantos sacrificios y dedicación hemos atendido durante estos años.
Relatan que los invasores hicieron unos ranchos, pero con el apoyo de la Guardia Nacional Bolivariana, Policía del Estado y el Consejo Comunal los desalojaron, pero igualmente se quedaron con una parte de nuestro terreno», explicó Medina.
Luego de tanta lucha en los diferentes entes competentes, lograron que el pasado jueves 26 de agosto la doctora Aura Farías hiciera la inspección. «Ya marcaron los linderos, aunque nos quieren imponer que aceptemos quedarnos con la casa y nos despojan del terreno, pero nosotros queremos recuperar todo lo que construimos con esfuerzo, porque nos pertenece».
Medina indicó que tienen cuatro meses encerrados en la parcela para no darle pie a los invasores de que se adueñen nuevamente. «Estamos esperando el informe final del que dependerá todo, y esperamos que se haga justicia», expresó.
