La Noria o Rueda de la Fortuna, comprada a China, que iba a hacer colocada en la Cinta Costera de Macuto tuvo un efecto TITANIC en el PSUV, ya que este partido fue cómplice de darle prioridad al ornato y no a la vida humana.
La pandemia desnuda esa política equivocada, errada del General García Carneiro. Evidenció el estado de abandono en que se encontraban los dispensarios y hospitales dependientes de la Gobernación.
Lo que habíamos sentenciado durante tanto tiempo atrás quedó probado de manera incontrovertible «No le da prioridad a las verdaderas necesidades del ciudadano«.
Aceptó con suma indiferencia, sin mover un dedo que los especialistas de los hospitales públicos migraran. Su entorno disfrutaba de regalos de taxis, cauchos, Mi Casa Bien Equipada mientras que los médicos estaban abandonados a su suerte.
Nada de esto es inventado o exagerado, nos quedamos cortos.