Richard Herrera, secretario de organización de Un Nuevo Tiempo en la parroquia Catia la Mar denunció que actualmente los niños que estudian en la escuela Catia la Mar de Zamora deben cruzar charcos de agua servida para poder llegar a la institución, pues hace dos semanas colapso una tubería cercana.
Informó que la falla está cerca de la capilla de Zamora, pero el agua se desborda hasta la escuela, convirtiéndose en un foco de enfermedades que pueden afectar tanto a los niños cómo a los vecinos que viven en los alrededores.
Manifestó qué el bote constante ya está deteriorando el asfalto, lo que afecta a los a los cientos de vehículos que por allí transitan.
