El 28J iniciamos la reconciliación, la concordia y el reencuentro de Venezuela.
Por César Alonso
Los pleitos, las peleas, las diatribas y los conflictos que son sinónimo de la política en nuestro país deben abrir paso al reconocimiento, el respeto, la concordia, la reconciliación y terminar todos juntos en el reencuentro de una Venezuela hermosa, fulgurante y fraterna.
Es una obligación de cada actor político hacer todos los esfuerzos para que la materialización del cambio político sea sin traumas, fricciones ni enfrentamientos.
La inmensa mayoría está hastiada de los radicalismos y extremismos que no nos llevaron a nada. Hemos perdido un tiempo valiosísimo y nos hemos separado hasta dentro del seno de la familia por haber pensamientos diferentes. Esto resulta inaceptable, no es propio de nuestra naturaleza.
Vamos todos juntos por lograr la reconstrucción del tejido humano que nos hace ser gente buena y de sentimientos nobles
