Ese mamotreto jurídico es inaplicable desde todo punto de vista, es algo interno de ellos los chavistas que desean reducir al mínimo la oposición interna a las medidas neoliberales del Presidente y a los negocios de los entornos del PSUV.
Tal como dijo el eminente economista José Guerra: La partida de defunción del socialismo del siglo XXI fue expedida por Maduro en 2021, con el salto cuántico hacia un capitalismo sui géneris, donde una especie de banda de nuevos ricos a la sombre del poder, está produciendo un tipo específico de acumulación originaria del capital en Venezuela.
Empresas han sido entregadas a socios comanditarios de quienes detentan el poder como es el caso del contrato de Teixeira Duarte que produce millones de dólares al año.
