Decirle pícaro es lo mínimo que podemos calificar al Gobernador gocho. Son conocidas en todo el estado sus marramuncias con el gas, Mi Casa Bien Equipada, apropiación de 34 taxis que eran para los choferes de la región, contratos de la Gobernación, apropiación ilegal de terrenos con testaferros y la complicidad del Registrador Subalterno.
Lo último fue el contrabando de gasoil para Colombia que hacían sus empleados gochos.
Desmantelamiento de la cantera de Catia La Mar manejada por sus familiares. Paremos por ahora de contar.
Rodeado de pedigüeños profesionales y los bajos fondos de la política está haciendo proselitismo obligando a los empleados de la gobernación asistir a sus actos de campaña.
