Toda la oposición debe ir unida en la próxima confrontación electoral. El COVID-19 desnudo la farsa del Gobernador y del PSUV que es lo mismo en esta región. No debemos dividir a la oposición entre «puros e impuros».
Pero en honor a la verdad verdadera hay diferencias muy notables entre los que participaron en las elecciones del 6 de diciembre y entre los partidos que componen el G4 que junto con otras organizaciones crean una alianza por lograr elecciones libres.
Miles de guaireños sufrieron los embates de la pandemia detectando que los centros de salud pública eran un desastre y las clínicas privadas desataron la especulación más atroz. No valoraron ni el Gobernador Jorge Luis García Carneiro ni los dueños de las clínicas privadas la vida humana.
Obviamente el gobernador está en peor momento y es posible que no vaya a su cuarta reelección.
Su equipo esta deteriorado y no disfruta de las simpatías ni del pueblo chavista acogotado por la terrible carencia de agua, gas y pésimo reparto de las bosas CLAP ni mucho menos del pueblo en general que en un 85 % rechaza su gestión.
