Derrota simbólica para el oficialismo
La familia Chávez es desalojada del poder político ejecutivo en el emblemático estado Barinas, donde nació Hugo Chávez.
No obstante, el oficialismo se ha llevado una derrota simbólica, que hasta ahora no ha tenido parangón, ya que no puede ser explicada desde otro argumento que no sea el de una extrema debilidad que le permitió a la oposición sacar una ventaja de casi 15 % en el estado en el que nació Hugo Chávez.
No es que esta derrota no pueda ser superable, pero el gobierno se volcó en Barinas para derrotar a la oposición y su estrategia resultó fallida. Así, la oposición ha encontrado una fórmula exitosa que puede perfeccionar en los próximos años y que está basada en la participación electoral.
Derrota anticipada
El primer boletín oficial del Consejo Nacional Electoral (CNE) cerca de las 11:20 de la noche de este 9 de enero ratificó la derrota anticipada por el propio Arreaza, el candidato impuesto por Maduro y el capitán Diosdado Cabello cuando ordenaron repetir la elección en ese estado que ya habían perdido en las regionales del 21 de noviembre pasado.
Según los cómputos del CNE, el opositor Sergio Garrido, de la MUD, obtuvo 172.497 votos válidos, es decir el 55,36%. Jorge Arreaza consiguió 128.583 votos, el 41,27%.
El candidato pro chavista y conocido tránsfuga de la política venezolana Claudio Fermín sacó 5.596 votos, es decir, apenas el 1,77%. Otros candidatos sumaron 4.897 sufragios, el 1,60%.
Arreaza no pudo convencer a los electores de Barinas, pese a un notorio ventajismo oficial y el claro uso de recursos del Estado en la campaña electoral.
En las últimas semanas los habitantes de Barinas presenciaron operativos de última hora para llevar gas, gasolina y hasta electrodomésticos en un intento del chavismo por paliar los graves problemas de esa entidad llanera y comprar votos de resentidos ciudadanos.