Cuánto le han costado al país las expropiaciones de Hugo Chávez
A la reciente decisión judicial que obliga a Venezuela a pagar casi nueve mil millones de dólares a ConocoPhillips por la expropiación que sufrió en 2007, se suma una larga ristra de demandas y dinero que los venezolanos hemos perdido gracias al delirio de un hombre que creyó que el país era suyo. Entre 2007 y 2009 se utilizaron más fondos para pagar expropiaciones y nacionalizaciones que para la producción de Pdvsa
Caracas. «-Prepárame el decreto y vamos a expropiar a Cargill. No vamos a tolerar. Si las empresas Polar, podrán creer sus dueños que tienen sangre azul, no entran por la goma, señor Lorenzo Mendoza , los vamos a expropiar. Se lo estoy alertando. Vamos preparando los decretos, Elías Jaua, usted me los tiene ahí. Uno tras otro…».
Como una mala imitación de Fidel Castro cuando anunciaba las expropiaciones de todas las empresas privadas en Cuba y cada vez que mencionaba una, la gente le respondía eufórica «!se llamaba!», el presidente Hugo Chávez quiso calcar esa fórmula que -vaya calamidad-, nunca había funcionado en la isla, empobrecida tras 60 años del socialismo. Pero contagiado con la enfermedad infantil del izquierdismo, Chavez insistió en imponer para Venezuela el mismo miserable destino.
Una a una, con el mismo derecho de quien reparte una herencia, el presidente usó alguno de sus domingos para anunciar cada nueva expropiación como un logro económico propio. Una a una, hasta llegar a 25 grandes empresas indispensables para el país, prometía ponerlas a funcionar en manos del gobierno, una debacle anunciada que a la larga sufrimos todos. Se dejó de producir alimentos (a excepción de la Polar), papeles, maquinarias, tubos, cemento, cualquier cosa y hasta lo inimaginable, porque también cayó la producción de petróleo, gas y electricidad. La tormenta perfecta que hoy seguimos padeciendo.La historia viene al caso porque a la pérdida de producción en casi todos los rubros, la devaluación de las fábricas e industrias expropiadas y cerradas, se debe sumar también la escandalosa cifra que le ha costado a los venezolanos semejante fracaso: nada menos que
14 534 897 777 millones de dólares, que es el costo final de las 21 demandas contra el país que, como el caso CONOCO, han sido juzgados en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI), y donde aún hay más de 10
casos pendientes, como las demandas contra Venezuela adelantadas por Holcim Limited, Holderfin B.V. and Caricement B.V, Anglo American PLC, Universal Compression International Holdings S.L.U, Kimberly-Clark Dutch Holdings, Tenaris S.A and Talta – Trading e Marketing Sociedade Unipessoal Lda y Air Canada, entre otras.
Gracias al trabajo minucioso que ha realizado CEDICE podemos conocer que de los 25 casos arbitrados, hay quince que han concluido con condenas a Venezuela, obligada a pagar millones de dólares en compensación a los inversionistas.» De los costos de arbitraje, el monto del caso Owen Illinois fue de 9 614 811,05 millones de dólares… Si a los costos del arbitraje de Owen Illinois se le suma el costo promedio de arbitraje y ejecución por los 16 otros casos que terminaron mediante condena, el monto total de la contingencia de los arbitrajes CIADI asciende a la cantidad de 14.696 mil 512.588 millones de dólares», señala el informe de CEDICE.
Entre ellos hay que incluir la sentencia de la Cámara de Comercio Internacional con sede en París que ordenó al gobierno de Venezuela a pagar 908 millones de dólares a la petrolera Exxon Mobil por la nacionalización de algunos de sus proyectos en 2007. También los 455 millones de dólares que se debió pagar a Owens-Illinois Group, uno de los mayores productores de contenedores de vidrio del mundo, por la expropiación de sus inversiones en Venezuela, seguido de los 98 145 325 millones de dólares que debe pagar a Vestey Group Ltd (Reino Unido), los 1 000 000 202 millones de dolares más intereses que debe pagar a Crystallex International Corporation (Canadá), entre otros muchos casos de envergadura.Según el portal Bilaterals.org (un sitio concebido como una especie de cámara de compensación donde las personas podían encontrar los acuerdos de libre comercio bilaterales y los tratados de inversión que se negocian y firman en todo el mundo), el gobierno de Hugo Chávez destinó, entre 2007 y 2009, más fondos para pagar expropiaciones y nacionalizaciones que para la producción de la petrolera estatal Pdvsa: 23 mil 377 millones de dólares contra 21 mil 931 millones de dólares. Es decir, 1. 446 millones de dólares más, empleados en pagar expropiaciones.
«Se trata de más recursos que los que destinó Pdvsa a gasto social entre 2001 y 2009.Y esta cifra no incluye los más de 20 casos en los cuales el Estado no ha logrado un acuerdo económico con las empresas nacionalizadas –la mayoría de ellas, petroleras, mineras y cementeras– y ahora sometidas a arbitraje internacional».
Aunque no todas las expropiaciones llegaron a Ciadi. Según la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), entre 2007 y 2012, los procesos de nacionalización y expropiación de empresas ascendió a 1.168, la gran mayoría de las cuales probablemente hoy formen parte del cementerio de fábricas e instalaciones que se consiguen en todo el país, vueltas chatarra en su mayoría. Al extremo de que la chatarra se ha convertido en un producto de exportación no tradicional, otro legado inútil de Hugo Chávez .