Crece el malestar por los bajos salarios en Venezuela incluso entre los chavistas
La subida de los bonos anunciada por Maduro no calman a los ciudadanos, que amenazan con más protestas
La furia por los bajos salarios va en aumento en Venezuela, incluso entre las propias filas chavistas. Los esperados anuncios de mejoras salariales por el Gobierno de Nicolás Maduro el pasado 1 de mayo han aumentado la condena de la mayoría de las ligas obreras y frentes laborales.
Miles de trabajadores del sector público y privado, maestros, médicos y enfermeras, pensionados y jubilados han realizado protestas estos días, en los que califican los anuncios del Gobierno de “burla”.
El primero de mayo, Día del Trabajo, en una concentración frente a sus partidarios, Maduro anunció el aumento de un bono salarial de 30 dólares (denominado “Bono de Guerra Económica”), y el incremento de los cestatickets a 40 dólares, pero no aumentó el salario mínimo mensual, que con su valor de cinco dólares es el más bajo de Latinoamérica. El salario mínimo mensual venezolano fue varias veces el más alto de la región hasta, al menos, la primera década del siglo XXI.
“Con este decreto de Maduro se viola toda la legislación laboral del país”, afirma Jaqueline Richter, abogada laboral y académica de la Universidad Central de Venezuela. “El 90% de los ingresos del trabajador son ahora bonos, no promediables ni para vacaciones, ni para fin de año, ni para prestaciones. Lo más grave es que estos aumentos destruyen el sistema de Seguridad Social del país. Ni los dictadores del Cono Sur de los años 70 se atrevieron a desalarizar el trabajo de esta manera”, añade
Pedro García, activista pensionado, y miembro de la directiva del Comité Nacional de Conflicto –instancia paraguas que agrupa a las organizaciones sindicales descontentas-, afirma que la plataforma a la cual pertenece discute con sus agremiados sobre los próximos pasos a dar, y no descartan una secuencia escalonada de paros laborales. “El mundo laboral es un hervidero, la molestia es grande. Pensionados y jubilados estamos preparando una jornada de protesta para este 15 de mayo”, advierte.
“Los aumentos anunciados por Maduro son un engaño”, afirma María Alejandra Díaz, abogada laboral, exconstituyente y militante chavista. “Hasta el mes pasado, estaban pagando 44 dólares al cambio, y ahora el ingreso vale la mitad.” Díaz criticó con dureza que Miraflores se excusara, primero, en las dificultades existentes con las sanciones internacionales, y que ahora lo haga invocando las consecuencias de la reciente purga anticorrupción que ha llevado a la cárcel a varios colaboradores del propio Maduro.
Los voceros del alto Gobierno argumentan que el Ejecutivo hace enormes esfuerzos para mejorar los ingresos salariales en la arrasada economía venezolana, y que la componenda de las sanciones internacionales al país junto al asedio a la administración de Maduro han dificultado estos objetivos.
Maduro reaccionó irritado a las críticas: “Buscan destruirme”. Prometió que “más temprano que tarde” la nación iniciará con firmeza el camino a la recuperación del salario, “para callarle la boca a los hablachentos de las redes sociales”, dijo. “Es un verdadero milagro económico que en medio de esta guerra podamos atender las necesidades de nuestro pueblo” afirmó en un encendido discurso Jorge Rodríguez, del oficialista PSUV y actual presidente del Poder Legislativo. “Quisiera saber en cual país del mundo un gobierno aumenta el ingreso de sus trabajadores en 2.000%”.
El desfalco milmillonario de la red de corrupción Pdvsa-Cripto –estructurado en torno a Tarek El Aissami, uno de los jerarcas del régimen, caído en desgracia-, ha producido una sangría de recursos que ha colocado en serios problemas de flujo de caja al Gobierno de Nicolás Maduro. Miraflores ha perdido 3.000 millones de dólares que no ha podido invertir en obras de Gobierno por causa de facturas petroleras no cobradas. Los funcionarios corrompidos del chavismo usaban las rutas alternas que exige el cerco de las sanciones internacionales para apropiarse del dinero producto de la venta de petróleo.
El impacto fiscal del dinero extraviado explica el aplanamiento de la curva de crecimiento de este primer trimestre de 2023, y ha obligado a algunos economistas a recalcular el comportamiento general de la economía nacional este año.
Nicmer Evans, activista político, fundador del movimiento Democracia e Inclusión, antiguo militante chavista, afirmó que “el truco de magia que ha presentado Maduro ha generado una gran indignación en el pueblo trabajador. La bonificación del salario viola la Ley Orgánica del Trabajo que ellos mismos crearon. Las protestas laborales se van a acelerar.”
ElPais.com