El país clama porque el proceso electoral del próximo 28 de Julio sea el inicio de un proceso de entendimiento, respeto, reconocimiento y reconciliación, que nos permita poder avanzar en paz y tranquilidad hacia la normalización de todos los ámbitos de la vida diaria, y que la política nacional culmine el infructífero ciclo de las peleas y las diatribas.
Todo el país apuesta a que las elecciones marquen un antes y un después; que sea el inicio de la Venezuela de todos y que los odios queden a un lado y nos unamos de corazón por el objetivo de tener las condiciones necesarias para que se genere progreso, desarrollo y prosperidad.
Ciertamente eso es lo que se espera que todo esté proceso Electoral fijado para el 28 de Julio, se desarrolle en un ambiente de armonía, paz y tranquilidad y que el cambio por venir, de igual forma permita que estos mismos elementos sigan siendo punta de lanza para alcanzar los propósitos establecidos de nuestra Nación.